La ciencia ya ha demostrado las múltiples virtudes de la dieta mediterránea. Sin embargo, la dieta que sigue (o seguían) la mayoría de españoles puede ser mejorada. La guinda de una dieta tan saludable sería la coenzima Q10.
Según un estudio elaborado por científicos del Centro de Investigación Biomédica en Red-Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición (CIBERobn), la dieta mediterránea enriquecida con la coenzima Q10 posee un potente poder antioxidante para las personas mayores.
Los pacientes del estudio (diez hombres y otras tantas mujeres de 65 años) fueron sometidos a tres dietas isocalóricas durante periodos de cuatro semanas para cada una: dieta mediterránea suplementada con cápsulas de coenzima Q10, el mismo modo de alimentación pero con cápsulas placebo y la dieta occidental rica en grasa saturada.
El resultado fue que la coenzima Q10 amplificó los efectos beneficiosos de la dieta mediterránea, ya que redujo mucho más la expresión, tras la comida, de los genes que codifican las proteínas relacionadas con el envejecimiento.
La investigación, cuyo resultado se publica en la revista Age, refuerza la teoría sobre las propiedades beneficiosas de la molécula Q10, que actúa como una de las principales fábricas de energía del organismo humano, sobre todo a la hora de retardar el envejecimiento.
La coenzima Q-10 puede obtenerse mediante el consumo de determinados alimentos:
- Carnes rojas.
- Pescados azules: sardina, atún y caballa.
- Aceite de soja o cacahuate.
- Las familias de las coles y las espinacas.
- Vísceras de los animales: corazón, riñón e hígado.
Esta enzima también se caracteriza, entre otros elementos, por ser un poderoso protector cardiovascular, por fortalecer el sistema inmune y por contribuir a reducir el peso de manera natural.
Titular
No hay comentarios:
Publicar un comentario