El pasado diciembre la empresa confesó que sus pulseras eran una estafa: 'Hemos asegurado en nuestra publicidad que las pulseras Power Balance mejoran la fuerza, el equilibrio y la flexibilidad. Admitimos que no hay pruebas científicas creíbles que apoyen a nuestras afirmaciones y, por lo tanto, hemos incurrido en conducta engañosa en contra de la sección 52 de la Ley de Prácticas Comerciales de 1974'. Y añaden: ‘Si usted siente que ha sido engañado por nuestras promociones, queremos pedirle disculpas sin reservas y ofrecerle un reembolso completo'.
La pulsera de silicona, de la cual se han vendido millones, contiene un holograma que prometía equilibrar la energía natural del cuerpo y, anteriormente a la demanda en los EE.UU., Italia sancionó a la compañía con 350.000 euros por estos motivos. En nuestro país, FACUA-Consumidores en Acción presentó una demanda por publicidad engañosa. Andalucía multó con 15.000 euros Power Balance 'a pesar de que la denuncia también fue remitida al Instituto Nacional de Consumo del Ministerio de Sanidad.
Ahora, la empresa ha negado que vaya a cerrar debido a las múltiples demandas, y muestra de ello es que ha lanzado un nuevo “producto milagro”, esta vez para la boca: "mouthguard", un protector bucal.
Al igual que las populares pulseras, el "mouthguard" también está elaborado con silicona y ofrece crear espacio y flexibilidad para la mordedura de un individuo, lo que resulta en armonía entre los dientes y los músculos en la cara.
La página web de Power Balance refiere que para la fabricación del nuevo producto se asociaron con uno de los fabricantes de dispositivos médicos líderes y buscaron la ayuda de una de las instituciones más importantes de Estados Unidos para llevar a cabo una serie de estudios clínicos, a fin de asegurar los resultados previstos.
Precisa que se hizo una prueba de rendimiento con decenas de atletas profesionales a través de una amplia gama de deportes como fútbol, hockey, baloncesto, artes marciales mixtas y el béisbol.
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