Hacer deporte eleva las defensas, concluyeron expertos estadounidenses.
Realizar ejercicio no sólo ayuda a mantenerse en forma, investigadores estadounidenses comprobaron que realizar actividad física, aunque sea por periodos breves, es un buen remedio contra el resfrío.
En la investigación, publicada en el último número del British Journal of Sports Medicine, se solicitó a mil dos voluntarios de entre 18 y 85 años que anotaran durante tres meses de invierno sus síntomas, además de controlar la cantidad de infecciones respiratorias que tuvieron.
Los investigadores concluyeron que quienes se ejercitaron cinco o más días a la semana redujeron hasta 46% la frecuencia de resfriados que el resto.
Además, quienes eran físicamente activos sufrían menos días los síntomas del resfrío (41% menos), en comparación con el grupo más sedentario.
Según el estudio las personas más deportistas también padecían resfríos menos graves.
Aunque los investigadores no están totalmente seguros de la manera en que la actividad física ayuda a evitar contagiarse, especulan que esto se deber a que el ejercicio aumenta la producción de células del sistema inmune.
David C. Nieman, investigador principal del estudio lo explica así: "El ejercicio consigue que esas células circulen por el organismo y se enfrenten al enemigo".
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