Implantan electrodos cerebrales para mejorar los síntomas del trastorno obsesivo compulsivo.

Una psicocirugía es una intervención mediante la introducción de electrodos en el cerebro. Médicos del Hospital La Fe de Valencia han aplicado este método a un hombre afectado por un Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC). De este modo, mejorarán los síntomas de un problema que puede llegar a invalidarlo por completo.

El Trastorno Obsesivo Compulsivo es una enfermedad mental que se caracteriza por pensamientos y obsesiones que aparecen de forma impulsiva y repetitiva. Afecta a entre un 2 y 3% de la población en general y hasta la tercera parte de los afectados puede no responder a un tratamiento convencional.

La nueva técnica, la estimulación cerebral profunda (ECP) es un procedimiento quirúrgico que consiste en implantar electrodos conectados a un dispositivo neuroestimulador en áreas predeterminadas del cerebro.

A través del neuroestimulador se transmite corriente eléctrica a la punta del electrodo con la intención de modular la actividad cerebral y restaurar, así, el funcionamiento normal de los circuitos cerebrales que se encuentran alterados en algunas enfermedades psiquiátricas, como el TOC.

La intervención, una técnica puntera de cirugía cerebral que solo practica un reducido número de hospitales españoles, ha sido realizada por la Unidad Multidisciplinar de Estimulación Cerebral Profunda del Hospital Universitari i Politécnic La Fe de Valencia.

Hasta el momento, los pacientes con TOC resistentes al tratamiento convencional con psicofármacos o psicoterapia podían someterse a una cirugía ablativa, un proceso irreversible con el que se lesiona de forma controlada una zona cerebral profunda.

Según el neurocirujano de la Unidad Funcional de La Fe, Antonio Gutiérrez, "la farmacología y los tratamientos médicos que se aplican en estos enfermos son mucho más agresivos para su propia mente" que la psicocirugía.

La ECP permite mejorar "de forma moderada o importante" los síntomas obsesivos y las compulsiones en entre un 60 o 70% de los pacientes, y es además una intervención quirúrgica con un postoperatorio inmediato "muy agradecido". Lo asegura Irene Martínez, neuróloga encargada del Programa de Estimulación Cerebral Profunda de La Fe.

La Unidad Multidisciplinar de Estimulación Cerebral Profunda del Hospital La Fe se puso en funcionamiento a finales de 2009 y, desde entonces, veinticinco pacientes con Trastornos del Movimiento (Enfermedad de Parkinson, distonía y temblor) resistentes a los tratamientos farmacológicos habituales se han beneficiado de este programa.

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